lunes, 24 de octubre de 2011

Empate inesperado (0-0)


El Sevilla Fútbol Club empató ayer a cero en el Nou Camp frente al mejor Barcelona de la historia, por lo que sigue invicto en Liga, en un partido que ninguno de los dos equipos olvidará jamás gracias, entre otros, a un chaval que está dado lo que nadie esperaba de él, y demostrando un nivel por encima de muchos otros guardametas españoles: Javi Varas


El que le ha arrebatado la titularidad al mejor portero de cuantos ha tenido el Sevilla lo paró ayer todo; incluso un penalti en el descuento al jugador más temido del momento. El de Pino Montano está mostrando una confianza a tener en cuenta por Vicente del Bosque para la próxima convocatoria de La Roja que tendrá lugar dentro de pocas semanas. Supuestamente, a la Selección han de ir los que en mejor estado de forma se encuentran, y es indudable que Javi Varas está entre los tres mejores guardametas actualmente.

En cuanto al partido, se vio un Sevilla diferente al de otros años. Por poner un ejemplo, ayer Marcelino salió al Nou Camp con la línea de presión en el mediocampo y terminó con ella en su propia área; algo totalmente lógico y normal frente al Barça. Lo que no era normal es salir a disputar los 90 minutos con esa misma línea de presión a 15 metros de tu propia portería, como era el caso de Manolo Jiménez, quien recuerdo que salió con siete defensas en una ocasión al estadio blaugrana.

No hay otra forma de detener al Baça, mas que la de ayer. Genial el planteamiento de Marcelino, quien tenía perfectamente colocados a sus futbolistas sin apenas dejar huecos para meter el balón a los cracks de Guardiola. Otra diferencia respecto a otros años: a día de hoy, cuando todos los jugadores se meten en el área a defender, todos lo hacen de manera ordenada y no "a hacer bulto". Bajo mi punto de vista, el único error del técnico asturiano fue quitar a Manu del Moral para dar entrada a Kanouté, y no lo digo por la expulsión, pues sería muy ventajista. Manu estaba haciendo un trabajo digno de mención, presionando la salida de balón del Barça y luchando cada pelota en juego; mientras que Kanouté apenas se movía del sitio buscando bajar cada balón y abrir a banda, pero estuvo muy poco acertado.


Al final del encuentro dejó Iturralde González cuatro minutos de descuento. Cuando ya estaban a punto de cumplirse, Andrés Iniesta se interna en el área y cae derribado por una entrada de Federico Fazio (ojo al partido del argentino; dije el día anterior al partido en NEO FM que debía ser titular y por poco me apalean. No me equivoqué. Como dije en twitter, se merece una "limpieza de sable" de más de uno). Hay muchas dudas en cuanto a la pena máxima, y voy a dar mi opinión sobre ella:

Para mí es penalti. Para empezar, es Iniesta el que golpea el balón y no Fazio, por lo que la duda está en si el argentino toca o no al jugador del Barça. Creo que es penalti porque el contacto se produce cuando Fazio mete la otra pierna, pues en principio entró con una. La pierna del sevillista hace un movimiento extraño justo en el momento en que Andrés Iniesta comienza a caer, que además lleva la cabeza levantada y no puede ver si Fazio ha metido la otra pierna. Por ello, creo que hay contacto y, por tanto, penalti.
Lo vio muy claro Iturralde, pues el linier no lo marcaba...

Entonces se produce otra jugada que está dando aún más que hablar: la agresión de Kanouté a Cesc Fábregas. El de Mali toca el balón para desconcentrar a Messi, quien iba a lanzar la pena máxima, Fábregas se acerca a recriminárselo y le dice algo a Kanouté, puesto que el catalán se tapa la boca y es cuando el delantero se gira para, en principio, propinarle un puñetazo, pero se ve claro como a mitad de camino se arrepiente y lo agarra por el cuello.
De primeras, justa expulsión a Kanouté. Es como la famosa jugada en la final de la Copa del Mundo entre Zidane y Materazzi: por mucho que te digan, tu reacción nunca debe ser agredir. Está claro que Fábregas le dijo algo a Kanouté, pero Cristóbal Soria ha desmentido en Marca que fuese "moro de mierda". Mal también Cesc, aunque como digo, igual de mal Kanouté por la reacción: el insulto no puede ser oído por el árbitro pues estaba lejos de la jugada, pero la agresión la ve todo el mundo. De todas formas, ambos han hablado y solucionado el asunto. Mucha gente seguirá con el tema pues le gusta que haya guerra en el fútbol, pero lo del campo se debe quedar en el campo. En mi opinión, no debe ir a más.

El recital de Iturralde González llega tras el lanzamiento de penalti errado por Leo Messi. El colegiado del encuentro estiró el mismo hasta los ocho minutos, permitiendo incluso al Barça lanzar una falta en la frontal del área cuando ya iban 7:30. En esa misma falta fue expulsado Fernando Navarro por doble amarilla, también de forma justa, pues el atacante blaugrana se internaba en el área.

Ahora a hacer más bueno aún el punto en casa frente al Rácing, el colista. Con tres puntos más, se pondría el Sevilla muy bien en la tabla. Por lo demás, espero que la gente no busque ganarnos otro enemigo más por la jugada entre Fábregas y Kanouté. Si ambos lo han solucionado, que son los afectados, ¿para qué seguir nosotros? Esto es para nada, pues se seguirá; al tiempo...

1 comentario:

  1. Es cierto: si entre los dos lo han hablado y lo han arreglado, no hay más que hacer ni comentar. Eso sí, yo sigo pensando que muy gordo tuvo que ser para que Kanouté se volviera a querer darle un puñetazo, aunque se frenase rápidamente.

    También es verdad que el tiempo que estuvo en el campo yo vi al Malí más acelerado de lo que en él suele ser habitual...

    En cuanto a las tanganas, sigo pensando lo de siermpre: los futbolistas no son más que niños ricos malcriados sin ninguna formación. Por eso se ven las cosas que se ven en el campo: jugadores "chivándose" al árbitro, el "pues antes este hizo esto", y ese afán de querer engañar siempre al árbitro (HACER TRAMPAS le llamo yo)...

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