Se me ocurrió esta entrada con motivo del incidente vivido en el Ramón Sánchez Pizjuán durante el partido frente al Sporting de Gijón en el que el Sevilla salió victorioso por tres goles a cero. Me refiero a lo ocurrido en la grada, cuando los Biris entonaron un cántico ofensivo hacia el equipo rival y una gran parte del resto del estadio desaprobó dicho cántico con silbidos, a lo que los ultras respondieron cantando más fuerte.
Mi opinión respecto al tema la expresé brevemente en la crónica del encuentro, pero no tengo ningún problema en volver a manifestarla: bajo mi punto de vista, el fútbol no sería tan bonito si no existieran las aficiones animando y cantando a su equipo; otra cosa es el efecto que tenga sobre el terreno de juego. Para mí, ni los silbidos ni los cánticos deben afectar a los futbolistas que juegan en el césped, pues este deporte requiere un alto nivel de concentración. Sin embargo, sí que serían muy fríos los partidos sin cánticos ni debates. Y es cierto que sin los ultras se animaría menos, pero el problema llega cuando entre esos ultras (no todos) hay imbéciles que aprovechan el más mínimo indicio de provocación para generar violencia. Sin ir más lejos, el otro día en el encuentro frente al Sporting: unos cuantos "intelectuales" apedrearon el autobús del equipo rival una vez finalizado el partido. No digo que lo vivido dentro del estadio fuese el principal motivo de ello, pero sí que tuvo, sin duda, muchísimo que ver. Evidentemente, esto ocurre en todos los ultras, no sólo en los Biris. Pero me centro expresamente en ellos porque son los que me tocan más de cerca.
Este tema me sirve para introducir otro que sí creo afecta un poco más al club como entidad. Desde hace varios años, más o menos cuando Manolo Jiménez comenzó a entrenar al Sevilla Fútbol Club, en la afición sevillista se podían diferenciar, en general, dos vertientes de opinión claras. Hasta ahí todo normal, pues como he dicho en más de una ocasión este deporte no existiría si no hubiese diversidad de opiniones y debates. Sin embargo, el problema llega cuando hay personas que no saben respetar las opiniones de los demás, pensando que la suya es la única válida y atacan a quienes no opinan de la misma forma.
Y esto mismo fue lo que ocurrió durante los tres años que Jiménez fue técnico del Sevilla Fútbol Club. Había gente que le cogieron un miedo inexplicable a la crítica, pensando que era el demonio personificado o algo por el estilo. La crítica no es mala siempre que no se haga intentando desestabilizar y afectar negativamente, y seguro que no había ningún sevillista con tales intenciones.
Mi opinión respecto al tema creo que es bastante clara: es cierto que los resultados llegaban, pero el abono subió de precio de forma desmesurada, y al menos yo me aburría muchísimo en la mayoría de los encuentros. Estoy seguro de que si el precio del abono no hubiese sufrido tal incremento, a Manolo Jiménez no se le habría exigido tanto; ese fue el primer error grave de la actual directiva.
Sin embargo, poco a poco parece que esa división fue desapareciendo, aunque actualmente aún existe pero en menor medida. Y al igual que había personas que opinaban que la decadencia del Sevilla se debía a la división que generamos (me incluyo) los que criticábamos el juego del equipo, yo creo que tampoco hace ningún bien poner "nombres" y calificaciones a los aficionados. Por ejemplo, es de sobra conocido del concepto "sevillistas de finales", y desde los medios del club también llegó a salir la frase "sevillistas lamentables". Pero actualmente y sin entender muy bien por qué, parece que existen otros como "sevillistas auténticos" y, atención a éste, "comepipas" o "mascapipas".
Creo que además de sonar bastante ridículo, no tiene nada de positivo catalogar a los aficionados de esa forma, pues eso sí que genera división en la grada. Además, también opino (y creo que en esto la mayoría estaréis de acuerdo conmigo) que cada persona es libre de ver el fútbol como le dé la gana. Al menos yo no grito en el campo ni me uno a los cánticos, sino que apenas presto atención a lo que ocurre en la grada, ni siquiera a lo que me comenta mi padre, sentado a mi lado, y me centro en lo que ocurre en el terreno de juego: las colocaciones de los futbolistas, los desmarques, las ayudas y las coberturas, etc. Y no sólo del Sevilla, sino también del equipo rival. Más de una vez me he levantando de mi asiento del Ramón Sánchez Pizjuán para aplaudir a jugadores del equipo contrario que merecen el reconocimiento de los que nos gusta este deporte, como es el caso de Xavi Hernández, al que seguiré aplaudiendo hasta que cuelgue las botas.
Es mi forma de ver el fútbol y no hago daño a nadie. Y creo que no por estar sentado sin unirme a las palmas y los cánticos se me debe catalogar como un "sevillista mascapipas", ni aporto menos en el estadio que otro que llega a su casa con la garganta inflamada y sin voz.
Y vuelvo a repetir que si una persona quiere criticar al equipo está en todo su derecho. Pues como sevillista no lo hace a mala leche y en el campo tiene el mismo valor para el club (el precio del abono) que otro con las palmas ensangrentadas de aplaudir.
En definitiva, me parece muy lamentable acusar a otros sevillistas de hacer daño al equipo dividiendo a la afición, y a la vez establecer una clasificación de quién es más sevillista, catalogando además a cada "sector" con nombres tan ridículos e infantiles como "sevillistas auténticos" o "mascapipas". A ver si por ir al estadio a ver tranquilo un partido de fútbol estoy obligado a cantar y animar; y si alguien piensa eso, bajo mi punto de vista está tremendamente equivocado.
Espero comentarios al respecto, ya que creo que es un tema bastante interesante.
Muy de acuerdo con tu post.
ResponderEliminarEl fútbol es un reflejo de la sociedad, y normalmente sale más lo malo que lo bueno.
En los estadios hay gente de todo tipo, y debemos respetarnos seamos como seamos, y todos son tan sevillistas como los demás, desde Del Nido hasta el que ve los partidos pirateando el plus por internet.
El problema es que algunos, los que intentan insultar a otros llamandoles "mascapipas" se creen mejores simplemente por el hecho de cantar todo el partido, sin ver el daño que le puede hacer a su club al apedrear un autobus, tirar una botella de agua o simplemente encender una bengala.
Nada que decir porque ya hemos hablado de todo esto en clase.
ResponderEliminarTambién estoy muy de acuerdo con Santi
Muy de acuerdo contigo Manu, i ten más, los problemas vienen después de los éxitos. Pero de todas formas, y como sevillista vetereno, te diré que la afición del Sevilla es como es. El fútbol, es como es y las personas somos como somos. Y nunca mejor dicho, el fútbol es un estado de ánimo y la gente está myu quemada por otras cuestiones. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias a los tres por comentar.
ResponderEliminarSanti, tienes razón en que los que han inventado el concepto "mascapipas" y se consideran ellos mismos "sevillistas auténticos" (me parece patético y lamentable tener que estar hablando de esto) se creen que su papel es más importante en el club que el de otra persona callada en el estadio. Y lo peor es que al considerarse más sevillistas que nadie justifican hechos lamentables como el apedreo al autobús del rival.
Tocayo, lo mismo te digo, nada que decir. XD.
Alexis, es cierto que mucha gente se lleva al fútbol los problemas de casa, trabajo, etc. y allí se desahoga. Pero eso no es motivo para atacar a otros sevillistas y catalogarlos como les dé la gana por el simple hecho de no ver el fútbol de la misma forma.
Muy agusto que veo yo el fútbol en Gol Sur calladito, sin catalogar a nadie y sin ningún problema de aplaudir al equipo rival cuando lo hace bien.
y tambien estamos los "sin carnet" estos somos lo último para el sevillismo.
ResponderEliminarun saludo y muy buen post
El tema de la gente que no tiene abono creía que ya se había superado, pero es cierto que muchos (no todos) de los que ponen calificativos a los aficionados dan menos credibilidad y hacen menos caso a las palabras de alguien que no tiene carnet. Y yo, al menos, no estoy de acuerdo en eso.
ResponderEliminarComo podéis ver, no me gusta en absoluto los calificativos a las personas porque sean de opinión diferente. Hacerlo me parece caer muy bajo.
O sea, que con la cae en esta ciudad por parte de la prensa en forma de difamaciones al presidente, consejeros, jugadores, sin que sea por supuesto una campaña para desestabilizar, simplemente porque hay que contar cosas, lo que sea, aunque sea falso, ahora nos entretenemos en debates estériles y sesgados sobre lo que comenta tal o cual sevillista en tal o cual blog.
ResponderEliminarMientras el Cuarto Poder campa a sus anchas por doquier sin ninguna crítica a su "reputación", mientras el Cuarto Poder se erige en la voz de la afición, la voz de la verdad, la voz de la realidad, con continuos dimes y diretes porque así funcion este mundo, nosotros nos entretenemos en ser las monjas de la caridad que no hacemos daño a nadie con nuestro comportamiento, y claro, alguien puede decir constante y diariamente a través de sus altavoces lo que le plazca del Sevilla, de la afición, de los consejeros, de la dirección deportiva, de los fichajes, de todo, pero cuando otra parte da su opinión, eso no se puede consentir.
El problema Manu no es los calificativos a los sevillistas, parece que pierdes el norte, el problema es muy distinto a todo lo que planteas.
Y el problema no es que los sevillistas no puedan opinar, ni crean todo lo que se les cuenta, el problema es que no nos enteramos que la prensa de nuestra ciudad, no está por la labor de hacer el camino de las temporadas al Sevilla más suave por muchos aspectos.
Ya no se trate de que manipule, o cuente historietas, el problema es que hemos ganado 6 Títulos con una estructura que en su día, fue calificara por Santiago Ortega con la siguiente frase a raíz de la consecución de la Copa del Rey ganada por el otro equipo de la ciudad en 2005.
Santiago, a raíz de aquella situación dijo lo siguiente en antena, en directo, para toda su audiencia:
"En la calle Jabugo deben estar ahora mismo hartándose de reír de las estructuras del Sevilla"
Las estructuras del Sevilla, 6 Títulos Santiago, 6, pero es igual, no importa nada, él seguira poniendo todo eso en solfa, y mientras todo esto ocurre delante de las narices, nosotros nos detenemos en debates estériles de sevillistas de finales, comepipas, etc. etc.
Este es el problema Manu, que los contadores de la realidad, tienen los tanques en la calle.
No es aconseable opinar de forma sesgada contando SÓLO aquello que se quiere contar para convencer a la audiencia, si hablamos de sevillistas que califican a otros sevillistas, hablemos también de periodistas que también califican DIARIAMENTE a otros sevillistas.
Los tanques están en la calle Manu, te guste o no te guste, lo compartas o no lo compartas.
Michelangelo